lunes, 15 de febrero de 2016

Estos son nuestros vídeos para clase de informática sobre 

EL ORDENADOR Y SUS COMPONENTES.




jueves, 26 de noviembre de 2015

jueves, 19 de noviembre de 2015



Lo triste es que éramos como éramos...

Lo triste es que éramos como éramos porque muchas veces no habíamos podido ser con alguien. Éramos un montón de cicatrices conservadas, al vacío, entre la piel y los huesos. Adentro, donde dicen que también está la belleza. Qué ironía. ¿Sabes? Aún no he podido conocer una sola noche; una sola; en la que no me desconozca, aunque sea un poco. El reloj da la una de la madrugada y salgo al porche y me pongo a mirar el cielo. Y mientras me fumo un cigarro conjugo toda clase de preguntas. Por qué y cómo. Hasta cuándo y con quién. Por cuánto tiempo o hasta dónde. Luego se hace demasiado tarde y no me da tiempo a responder ninguna. Me voy a dormir con la presión de aquel que sabe que se deja para mañana lo que tendría que haber hecho ayer.
Es un vicio, como la nicotina, quejarse de la herida antes de que duela. Echar de menos algo que nunca tuviste. Pensar que ya no te ama alguien que nunca te quiso. Tengo la sensación de que hemos levantado nuestra vida sobre la base inestable de un montón de ojalás que terminaron convirtiéndose en nuncas. Siempre parece que estemos a punto de ceder. Y es que hay personas que te rompen, pero no del todo. Ni siquiera tienen ese detalle. Te dejan así, a medio destruir, como un montón de ruinas que aún se sostienen. Y además creo que podemos llegar a necesitar a alguien más de lo que podemos necesitarnos a nosotros mismos. ¿Puede ser vida sin nadie? Escuché una vez que la felicidad sólo es real cuando se comparte, y quizá sea verdad. Me gusta pensar que sí. Pero es tan difícil, en estos tiempos, encontrar a una persona que quiera oírte. O que sepa hacerlo. O a lo mejor el problema es que nosotros hace mucho que no hablamos de lo importante. Que hace mucho que no abrazamos con los ojos cerrados, como si salvásemos a alguien. Que hace tiempo que no dejamos de querer arreglarlo todo, en lugar de desear dejar de romperlo. Nos perdemos constantemente en el mismo sitio en el que estamos. ¿Quién dijo que los laberintos no podíamos ser nosotros mismos?
-Sergio Carrión-












No te salves.





No te quedes inmóvil
al borde del camino

no congeles el júbilo

no quieras con desgana

no te salves ahora

ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo




pero si pese a todo

no puedes evitarlo

y congelas el júbilo

y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.

-Mario Benedetti-









martes, 17 de noviembre de 2015


Rayuela.


Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca,


voy dibujándola como si saliera de mi mano,

como si por primera vez tu boca se entreabriera,

y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar,

hago nacer cada vez la boca que deseo,

la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara,

una boca elegida entre todas,
con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara,
y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por
debajo de la que mi mano te dibuja.
Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope,
nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan,
se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran,
respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes,
jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene
con un perfume viejo y un silencio.
Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo,
acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos
como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces,
de movimientos vivos, de fragancia oscura.
Y si nos mordemos el dolor es dulce,
y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento,
esa instantánea muerte es bella.
Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura,
y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

-Julio Cortazar-











jueves, 12 de noviembre de 2015

Holiiiiii, somos Andreita y Noa  y venimos a explicaros cosas de interés. Si quereis entreteneros por un rato os recomendamos leernos. Pinkibesitos y muchas letritas de amor jdksñahfñsaygoshafdklshfñasyhfdosahfdkjshfñsygosyhgokdshfñsoyfosayhgksh

Bienvenidos a un nuevo blog, un nuevo mundo de experiencias, de información avanzada y de muchas cosas xaxiguays que os contaremos a continuación. 
Os insertamos imagen de nosotras, las DIVAS DIVINAS DEL TRINITARIAS.

ASA ASA QUE CHULO




Andreita

Noaa